Ésta esta siendo la nota predominante. Por otro lado, los jugadores tienen que enfrentarse a un reto nuevo. Además de las medidas de seguridad por el tema del COVID-19, éstos tienen que someterse a hasta 3 partidos por semana, lo que resulta una auténtica locura, tanto por el tema físico como mental.
En la parte física, hay más lesionados y esto es algo con lo que el jugador tiene que lidiar en cada partido.
Las plantillas se están usando al completo. Prácticamente se utilizan todos los jugadores del equipo para afrontar éstos días de competición que quedan hasta llegar al final de temporada.
Las celebraciones de los goles tendrían que estar marcadas por la distancia de seguridad pero esto no se está cumpliendo, pues al llegar este momento los jugadores se unen para cantar dichos goles.
También la carga de partidos hasta final de temporada es algo inusual. Están siendo muchos partidos seguidos y aunque para el espectador que lo sigue desde casa puede ser atractivo, la verdad es que es una saturación de fútbol.
Habrá un campeón, pero éste quedará para la historia marcado por el tema del virus que hemos tenido que pasar durante estos más de 3 meses de confinamiento.
En definitiva, un fútbol atípico para una situación atípica.
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